insistiendo en ser mas alta y mas baja,
sobre tu cuerpo medidas exactas,
saltando de a una la vallas
y penetrándome muy dentro tu talla
de cactus dormido y enardecido.
Dualidades de ansias insaciadas,
que despeja mi garganta en el gemido
de saberme mas que que humana:
eterna, impaciente y flama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario